01 febrero 2012

Bésalas y diles adiós.



Han pasado siete años desde conocimos a las esposas más famosas de la televisión, siete temporadas de historia, drama, aventura, de querer y odiar a cada uno de estos personajes. Y por fin, el 25 de Septiembre del 2011 se estrenó el primer episodio de la última temporada de Desperate Housewives, el fin ha llegado para los 4 pilares de Wisteria Lane después de 157 episodios.

Los fans de la serie no podrán negar que la historia de Desperate Housewives dejó de ser innovadora e interesante después de la quinta temporada, Marc Cherry nos adelantó lo que pudo ser un excelente final definitivo para las esposas; Gaby pierde su belleza y tiene hijos, los hijos de Lynette crecieron y casi son unos delicuentes juveniles, Susan se divorcia de Mike y tiene otro torrido romance, mientras que Bree es una exitosa empresaria. Entonces, al ver que aún quedaban temporadas pendientes para las esposas desesperadas, nos preguntamos ¿qué nos puede ofrecer Marc Cherry para las siguientes temporadas?.

Y la respuesta a la pregunta anterior fue triste para todos, ya que no pudieron ofrecernos mucho. Los fieles seguidores de la serie (y que nos chutamos la 6ta y la 7ma temporada) notamos un crecimiento en la historia al final de la séptima temporada, el padrastro de Gabrielle (que abusó de ella cuando era jóven) regresa para atormentarla, por lo tanto Carlos (el esposo de Gaby) mata al padrastro por defender a su esposa, ya que éste quiere abusar de nuevo de ella, lo que nos lleva al gran final donde las amigas de Gabrielle se hacen cómplices de ella y su esposo al ayudarlos a deshacerse del cuerpo del padrastro.

Lo que nos lleva al inicio de esta octava temporada, donde se pondrá a prueba la amistad entre Susan, Gabrielle, Bree y Lynette, porque no es lo mismo demostrar tu amistad y lealtad a un amigo cuando éste se queda sin dinero, se divorcia o pierde a un ser querido, que cuando te haces cómplice de un asesinato sólo para protegerlo.

En “Secrets That I Never Want To Know” (primer episodio de la nueva temporada), vemos el duelo por el que atraviesan Susan y Lynette, que al parecer son las más afectadas por el suceso (además de Carlos, que fue el asesino) y el estrés por el que pasan debido a que Bree esta saliendo con un detective al que tratan de ocultar todo. Los días pasan y la amistad entre ellas se encuentra en un punto crítico, por lo que Gabrielle trata de hacer las paces y demostrar que todo esta bien realizando su “parillada anual”, donde las cuatro amigas después de una pequeña riña (muy al estilo de Marc Cherry) llegan a otro acuerdo y juran no involucrar a más gente y guardar el secreto (de nuevo). Pero cuando por fin todo parece estar en orden, una carta anónima llega al buzón de Bree dejándola casi cuadrapléjica, la cual dice: “I know what you did. It makes me sick. I’m going to tell”.

El final de este primer episodio es digno de aplaudírsele a Marc Cherry, la nota al final nos lleva a recordar la primera temporada de la serie (la mejor a mi gusto), la cual hizo que Mary Alice se suicidara. Lo que nos lleva a hacer nuevas preguntas y formular nuevas hipótesis; ¿quién mandó la nota?, ¿qué pasará con las cuatro amigas?, ¿cómo terminará su amistad?, ¿podrán Susan y Lynette guardar el secreto?. Por otro lado, en la primera temporada la que mandó la nota a Mary Alice fue Martha Huber, pero ¡ella está muerta!, además, Renee la amiga de Lynette fue la única que no participó en el siniestro, ¿pudo ser ella? o ¿pudo ser una de las 4 amigas involucradas?. Hay muchos sospechosos que pudieron mandar la carta pero sólo nos resta esperar al episodio final para descubrir la verdad.

Lo que me resta por decir es que se perfila una buena temporada para el cierre de Desperate Housewives, por lo menos una decente temporada final. Es inevitable, una de nuestras amas de casa va a sucumbir a la presión y va hablar y estoy seguro que Marc atará los cabos sueltos y nos llevará por los rincones más oscuros de Wisteria Lane y las Desperate Housewives.

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